«A ver como tengo el stance… bieeen. Subo el palo… bieeen. Equipación, por supuesto, impecable. Estoy cuadrado a la bola, objetivo claro, el hierro perfecto, solo hay que enviarla a la bandera… fácil«. Pero hay amigo, cuando crees que vas a dar el golpe soñado y te sale esta «castaña» los nervios afloran y el instinto que llevas dentro sale a relucir. Solo hay que ver a este jugador y lo comprenderán.