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El Circuito de Madrid de Profesionales ha aprovechado la última de sus pruebas antes del parón veraniego para cumplir con una de sus citas estivales, la ya clásica visita al ‘recorrido negro’ del Club de Campo Villa de Madrid. Como es habitual, el diseño de Javier Arana no dejó indiferente a nadie y permitió que muchos se lucieran. Al menos durante los primeros nueve, porque la segunda parte del día fue, en algunos casos, dramática.
Quien no se dejó sorprender por un campo que se presentó con un magnífico mantenimiento y con la novedad de los remodelados tees del hoyo 13, fue Sebastián García. Después de su victoria en Barberán y Collar, Sebas venía rondando las posiciones de podio y, tras sellar el segundo puesto en el Severiano Ballesteros PGA Tour celebrado en el RACE, la victoria estaba prácticamente anunciada.
En todo caso la de hoy no fue tarea fácil. Al ya bicampeón de esta temporada le tocaba madrugar y abrir el torneo acompañando de Gonzalo Vicente en un partido que tenía mucho de prueba de campo a través. Al menos para algunos aficionados empeñados en seguirles durante algunos hoyos, y que pronto abandonaron el intento. No en vano, completaron los 18 hoyos en un tiempo inferior a las tres horas.
Todo un récord durante el cual aún le dio tiempo a sellar 67 golpes para una victoria que se vio comprometida por los tres birdies que rubricó Gonzalo Vicente en los tres últimos hoyos para terminar a un golpe después de que García lograse salvar el par en el 18.
Disputada la décimo séptima prueba de la temporada profesional madrileña el circuito coge vacaciones hasta el próximo 20 de agosto, fecha en la que visitará el Real Club de la Puerta de Hierro a modo de pistoletazo de salida para la recta final de la temporada.
Fuente: FGM
