Cuánto sufrimiento ha causado el RC Valderrama en esta segunda ronda. Y es que si ya de por sí el recorrido invita a pocas vueltas por debajo del par del campo, a esto hay que añadirle un viento racheado durante varias fases de la jornada que ha hecho la vida imposible a más de un golfista. Hoy, acabar al par del campo ha sido un enorme resultado. Y a la vista está que Pablo Larrazábal (-3), con 71 golpes, le ha sacado un magnífico rédito al ascender desde la sexta posición al liderato en solitario del Open de España. De hecho, ha sido junto al inglés Andrew Johnston (-1) uno de los dos únicos golfistas que tras 36 hoyos continúan bajo par en el complejo gaditano.
Y eso que el deportista barcelonés, que arrancó arrollador con cuatro birdies en sus diez primeras banderas, se frenó en seco en el 11 y en el 12, con un bogey y un triplebogey, respectivamente. El par 3 resultó especialmente traicionero para el catalán, que tuvo que enfrentarse al bunker hasta en dos ocasiones –envió la bola desde el tee al obstáculo, y de éste la dejó de nuevo en otro-. Un error que no se vio penalizado en exceso gracias a la renta de -3 con la que contaba hasta esa bandera.
Pero Larrazábal no es el único español que se encuentra entre los diez primeros clasificados. Alejandro Cañizarez (Par), pese a no vivir uno de sus mejores días sobre un campo de golf, ha sido capaz de conservar la vitola de Top 10, así como Pep Anglés (+1) y García Pinto (+2), quien dos bogeys en el 7 y el 8 –antepenúltimo y penúltimo hoyo- le dejaron con la miel en los labios de poder ocupar un puesto más elevado en la tabla
Sergio García (+3), Rafa Cabrera-Bello (+5), José Manuel Lara (+5), Gonzalo Fernández-Castaño (+7), Nacho Elvira (+8), Borja Virto (+8), Álvaro Quirós (+8) y Adrián Otaegui (+8) también pasaron el corte y estarán junto a los mejores el fin de semana.