Es sorprendente lo que el autocontrol puede hacer por uno mismo. Y es que hace solo unos meses el no haber podido superar el corte en un torneo tan importante como The Players hubiera supuesto un serio traspié para Spieth, que hubiese sacado a relucir su fuerte carácter a las primeras de cambio.
Hoy por hoy, siendo una de las referencias del golf mundial, debe ser más comedido en sus actos –sobre todo si hay niños delante-. Lo ha demostrado esta misma semana, cuando protagonizó el malabarismo con el Flop Shot en la previa del AT&T Byron Nelson de Irving (Texas). Pero no quedó aquí la cosa. El golfista de Dallas deleitó a los niños con otro truco marca de la casa.
Aprovechando las condiciones de viento que se han dado estos días por el oeste de los Estados Unidos, a Jordan le colocaron un montón de globos y bajo ellos una pelota de golf, la cual iba flotando y debía golpear. Pues bien, sacando a relucir su encanto personal intentó impactar con ella una primera vez… pero no tuvo mucho éxito. Trató de hacerlo una segunda… Tampoco. Cansado, y ante las risas del público, se dio la vuelta y tiró el palo hacia atrás. Al menos se lo tomó con humor.
.@JordanSpieth experiences what #golf is like for the «rest» of us. @UnderArmour @ForTheWin #pga #JordanSpieth pic.twitter.com/NJWcNJwJuY
— Purpose 2 Play (@Purpose2Play) 17 de mayo de 2016