Con qué emoción ha empezado el BMW PGA Championship sobre la hierba de Wentworth. Hasta tres golfistas han concluido sus primeros 18 hoyos con siete golpes por debajo del par en la clasificación, un tremendo inicio protagonizado por el australiano Scott Hend, el surcoreano Yang y el holandés Joost Luiten. Pero que se anden con mucho ojo, que por detrás ya asoma el ídolo local Danny Willett (-6), capaz de protagonizar una gran vuelta que le ha valido para ser el único golfista de la parte de arriba que no ha cometido ni un solo fallo.
Y desde aquí no hay que deslizar mucho la vista para encontrar al primer español en el evento británico. Se trata del barcelonés Eduardo de la Riva (-3), quien comparte la décima posición con golfistas de la talla de Felipe Aguilar, Shane Lowry o el francés Victor Dubuisson. El jugador catalán tuvo un gran final de vuelta con dos birdies en los postreros pares cinco con los que ha podido solventar los problemas del día a su paso por las cinco primeras banderas, de las que salió con dos bogeys en su haber.
Tras él se encuentra el núcleo duro de nuestros representantes, pues con -1 aparecen ni más ni menos que cuatro golfistas. Jorge Campillo, Nacho Elvira, Rafa Cabrera-Bello y Pablo Larrazábal dan buena cuenta de ello. Y pudo ser mejor para todos ellos. De hecho, tanto el cacereño como el madrileño sufrieron un doblebogey en la parte final de su recorrido, que se unió a los cinco bogeys del canario y a la pobre vuelta del barcelonés, que había iniciado de forma extraordinaria el día con un -3 en sus cuatro primeros hoyos.
Por detrás de ellos aparecen Álvaro Quirós (+2), Alejandro Cañizares (+3), Miguel Ángel Jiménez (+6) y Borja Virto (+6), que deberán dar un giro de 180 grados en la vuelta de mañana si quieren seguir conservando las opciones de estar el fin de semana en la casa del circuito europeo.