El golf es un deporte que se decide por pequeños detalles: una calle no tomada, un mal approach, una corbata el primer día de competición… Es por esto que un mal día -y más si éste es durante fin de semana- puede ser condenatorio para las aspiraciones de cualquier jugador que busca hacerse con un torneo. Que se lo digan si no a Danny Willett (-7), que ha visto cómo en el transcurso de de los últimos ocho días ha perdido dos torneos que tenía prácticamente en el bolsillo.
Si hace una semana fue la ausencia de birdies la que hizo que doblara la cuchara ante Rory McIlroy en el Open de Irlanda, en ésta ha sido la enorme cantidad de errores –a los cinco bogeys sin acierto de las últimas diez banderas del sábado ha añadido en el tercer hoyo de este domingo un doblebogey con el que, prácticamente, ha dicho adiós a toda posibilidad de sumar su primer triunfo desde que se adjudicara el Masters de Augusta-. Un +7 en 13 banderas que ha tirado por tierra el gran trabajo que le llevó hacia el liderato.
Y entonces apareció el australiano Scott Hend (-3), que el sábado se marchó a Casa Club en el primer puesto y parecía situarse en buena posición para sumar su tercer triunfo en el circuito. Pero su candidatura salió rana. Desde el último partido del día el jugador oceánico encadenó error tras error –tras su paso por el hoyo 11 su marcador en la jornada era de +9 después de tres bogeys, otros tantos doblebogeys y un único birdie- y dejó el triunfo en bandera para el otro inglés en liza: Chris Wood (-9).
El espigado jugador británico, que no aparecía en las apuestas como uno de los favoritos para hacerse con la victoria, ha aguantado sereno desde primera hora de esta jornada dominical y, aunque ha dado opciones a sus rivales con tres bogeys en las últimas cinco banderas, ha superado en un golpe al sueco Rikard Karlberg (-8), protagonista con siete golpes por debajo del par de la mejor vuelta del día.
Por primera vez en muchas semanas, ningún jugador español ha finalizado entre los diez mejores en Wentworth. Eso sí, nuestros cuatro representantes han rozado el Top 20, un gran resultado en este BMW PGA Championship que ha tenido al barcelonés Pablo Larrazábal (T12, -4) como mejor jugador nacional, seguido por Eduardo de la Riva (T15, -3), Jorge Campillo (T15-3) y un poco más atrás el canario Rafa Cabrera-Bello(T22, -2).