Si hay algo que los golfistas esperan más que jugar sobre la hierba del Muirfield Village GC de Dublín (Ohio) cada vez que reciben la invitación para acudir al Memorial, es catar los extraordinarios batidos que el complejo estadounidense sirve a todos sus visitantes. Ya lo pudimos comprobar el año pasado, cuando el propio Jack Nicklaus –que de gastronomía y, especialmente, de helados sabe un rato- compartió un delicioso postre junto al vencedor David Lingmerth y subió la foto a su cuenta de Instagram.
Ahora, doce meses después de estos hechos, se ha debido extender la voz y no hay jugador que se precie que no haya acudido al asador que se encuentra en el complejo para pedir un “Muirfield Village Milkshake”. Poco importa que estos días le cuesten a más de uno alguna sesión extra en el gimnasio, porque la gloriosa mezcla a base de sirope Hershey, mantequilla de cacahuete y helado de vainilla bien merece la pena.
Según las últimas fotos subidas las redes por hombres fuertes del PGA como Bud Cauley, Smylie Kaufman, Justin Thomas o Rickie Fowler ellos parece que han optado por la versión clásica del dulce, aunque bien se podrían haber decantado por las distintas variedades de diferentes sabores. Para chuparse los dedos.