¿En qué momento a alguien se le ocurre la genial idea de golpear una bola con fuerza teniendo delante un elemento de metal? Sí, vale, seguramente la jugada no salió como este hombre había diseñado en su cabeza, pero no puede negar que la posibilidad de que el karma le pagase con la misma moneda estaba ahí.
Intentó hacer un vídeo a cámara lenta de su swing y de cómo iba cogiendo altura la bola… pero le salió rana a todas luces y se llevó un dolorosísimo golpe en plena espinilla de la pierna izquierda -al menos nos ahorró su cara de sufrimiento-. Eso sí, todavía puede dar gracias. Y es que un poco más arriba e igual no lo cuenta.





