No importa que seas el número uno del planeta, en el golf los fallos se pagan y Jason Day lo vivió en sus propias carnes en el hoyo 16 del Firestone CC. El australiano tenía el título prácticamente en su mano pero una tremenda escapada desde el tee unida a un golpe desde el rough que terminaba en el agua, provocaron que el aussie sumara un 7 (doblebogey) dejando la victoria en manos de Dustin Johnson. Y es que el golf, en muchas ocasiones es duro.
The monster shows its teeth.
Golf is hard. #QuickHits https://t.co/xmXtcAXMeH
— PGA TOUR (@PGATOUR) 3 de julio de 2016





