Todos los adjetivos que utilizáramos esta semana para definir el juego del golfista donostiarra se nos quedarían cortos. Y es que poco más se le puede pedir a Adrián Otaegui, que a sus 23 años le ha mirado de tú a tú a algunos de los pesos pesados de este circuito europeo durante cuatro días y se ha quedado muy cerca de sumar su primera victoria en Europa. De hecho, el domingo llegó a liderar en solitario durante algunos minutos este Made in Denmark, pero la calidad de Thomas Pieters ha sido un gran muro que no ha podido derribar en esta jornada pasada por agua.
Bélgica debe sentirse orgullosa esta semana. El país centroeuropeo ha sumado un doblete histórico en el European Tour y en el Challenge Tour –Thomas Detry ha pulverizado a sus rivales en Inglaterra- que le hace colocarse como el centro del golf en el viejo continente por unas horas. Pieters –que ya venía barruntando el triunfo desde los pasados Juegos Olímpicos, cuando finalizó cuarto- necesitaba la victoria de todas todas si quería que Darren Clarke le diera una de las tres invitaciones para la Ryder, y el joven jugador nacido en Amberes no se ha hecho de rogar. Ha entregado junto a Van Zyl la mejor tarjeta del día con 65 golpes –seis por debajo del par del campo- y se ha marchado con -17.
Un resultado que le ha hecho aventajar en un golpe al galés Bradley Dredge y en dos al estadounidense David Lipsky y al español Adrián Otaegui, que con estos guarismos se queda muy cerca de confirmar su presencia entre los 60 mejores jugadores de la Race to Dubai. Un -4 en el día del guipuzcoano –cuatro birdies y dos bogeys- que le han permitido lograr el segundo mejor resultado del curso después del Lyoness Open de primeros de junio.
Borja Virto (+6), el segundo español este fin de semana sobre la hierba de Himmerland, no pudo remontar el vuelo y con una ronda de 74 golpes se despide del país escandinavo en el T65, un resultado que le deja también cerca de esos 110 jugadores que renuevan la tarjeta del circuito para la próxima temporada.