El Athletic de Bilbao derrotó a domicilio al Manchester United con un histórico 3-2, en partido de ida de los octavos de final de la Liga Europa.
Rooney abrió el marcador a los veinte minutos y Llorente empató justo antes del descanso. Ya en el segundo acto, De Marcos y Muniain sentenciaron al equipo de Ferguson, que recobró esperanzas para la vuelta con un penalti transformado también por Rooney en el tiempo de descuento.





