Solo una gran jornada durante la ronda del viernes podría salvar a Gonzalo Fernández-Castaño (Par) de fallar su segundo corte consecutivo en el PGA Tour. El golfista madrileño cuajó una discreta actuación en estas primeras horas del RSM Classic y se complica su presencia el fin de semana, y con ella la posibilidad de ver a algún representante de la Armada compitiendo hasta el último día en este Sea Island Resort de Georgia. Y es que de poco le sirvió iniciar su vuelta con un birdie al 2 sobre la hierba del Plantation Course.
Esta, junto con el segundo y último birdie en el 17, fueron las únicas alegrías para el golfista capitalino en una ronda que no será recordada por su juego. Antes de eso, dos bogeys le pusieron en una situación muy complicada para salvar la papeleta. Aun así, se encuentra a solo dos impactos de cumplir con el primer objetivo de la semana, y unos cuantos birdies el viernes en el Seaside podrían darle la vuelta a la tortilla para seguir disfrutando de su juego en el campeonato.
En la parte alta, poca cara conocida. Y es que muchos están intentando aprovechar la ocasión de la baja de los top mundiales –bien por lesión, bien porque están en Dubái en el último evento de las Final Series del circuito europeo- para intentar arañar un suculento premio económico y un título que les asegure la tarjeta de la gira norteamericana durante las próximas temporadas. El canadiense Mackenzie Hughes (-9) lidera en solitario después de una vuelta en Seaside en la que ha conseguido nueve birdies sin fallo.
Por detrás del joven jugador de Ontario aparecen los estadounidenses Stewart Cink (-8) y Jonathan Byrd (-8), los dos a solo un impacto, mientras que a tres golpes se encuentra un nutrido grupo de deportistas entre los que destacan el japonés Hiroshi Iwata (-7) y Cameron Tringale (-7).