Manolete, Manolete, si no sabes torear… Una vez más estamos ante un caso de deportista famoso al que invitan a tirar unas bolas en un campeonato benéfico y termina haciendo un estropicio de dos pares de narices. En esta ocasión le tocó el turno a Torah Bright, una famosísima snowboarder australiana –de hecho, cuenta con dos medallas olímpicas en sus vitrinas- que practica a la perfección numerosas actividades, aunque para desgracia del cámara el golf no estaba entre ninguna de ellas.
Y es que de ser al contrario la bola nunca habría acabado en la espinilla de la persona que sostenía la cámara. La reacción de la deportista de 29 años fue preocuparse enseguida por su estado de salud, pero el mal ya estaba hecho. Al menos dormirá calentito un par de días.
Our cameraman is still icing up @TorahBright but he’ll be ok ? https://t.co/hTo82fb0Mb
— 7Golf ? (@7golf) 20 de noviembre de 2016