La segunda jornada del Genesis Open se vio avocada a la suspensión debido a la tromba de agua caída en el Riviera CC. A consecuencia de ello una buena parte del recorrido se quedó completamente injugable lo que motivó que una legión de trabajadores se pusieran manos a la obra para dejar en condiciones óptimas el terreno de juego. Un ejemplo de ello se puede ver en estas imágenes donde en un abrir y cerrar de ojos dejaron uno de los bunkers listo para la acción. A esto se le llama eficacia.
These courses don’t exactly dry out on their own pic.twitter.com/B8GTAOI0aH
— PGA TOUR (@PGATOUR) 18 de febrero de 2017





