Hay niños que nacen para jugar al golf. En OpenGolf les hemos mostrado la genialidad de unos cuantos de esos niños prodigio y a ellos hay que sumarles uno más. Se trata de este chaval de tan solo cinco años al que no le importa pegar la bola con el driver a zurdas, o con madera a diestras. La forma de golpear es tal, que prácticamente no se distingue si juega a izquierdas o a derechas… o quizás sea ambidiestro.





