Pablo Larrazábal luchará este domingo por su quinta victoria en el European Tour. Será en el Volvo China Open donde a falta de los últimos 18 hoyos es segundo por detrás de Dylan Frittelli, jugador que disputa su primera temporada en la división de oro ya que proviene del Challenge Tour.
Después de las dos primeras jornadas en las que sumó un eagle y 13 birdies por tan solo un bogey, el catalán cedió terreno en la llamada jornada del movimiento, principalmente por el viento que reinó en en El Topwin Golf & CC y por un putt que no se comportó como en días anteriores.
«Ha sido un día complicado en los que en los primeros nueve hoyos no lográbamos clavar el viento que soplaba más que en los dos primeros días, y cuando el viento de lado no sabes si está a favor o en contra, es muy difícil acertar, pero bueno…«, declaró Larrazábal al término de su vuelta en la que anotó 70 golpes (-2). «Ese birdie del 10 nos hizo despertar y bueno, hacer 70 con tres greenes a tres putts es para estar contento«, añadía.
«Si, ya se que viene del Challenge Tour (en referencia a Frittelli), lo hizo muy bien en el Challenge, ganó, eso quiere decir que sabe ganar, pero hacerlo en el European Tour cuesta mucho. Vencer es muy importante porque te da muchas cosas que seguramente se piense esta tarde, y yo he tenido la suerte de hacerlo en cuatro ocasiones, tres de ellas viniendo desde atrás y lo que a mi me gusta es atacar. Yo vengo aquí a ganar torneos de golf y mañana tengo una oportunidad de oro«, concluyó el barcelonés.