Partía cerca del Top 10, pero el domingo le ha jugado una mala pasada. Hablamos de Alejandro Cañizares (75 golpes, -2) que ha ejemplificado el quiero y no puedo de la Armada esta semana en el Nordea Masters sueco. El madrileño, que empezó con un birdie tempranero al 3, no fue capaz de seguir con la racha acumulada en estos dos últimos días y acabó perdiendo la partida ante el Barsebäck G&C, del que ningún español salió bien parado en los últimos 18 hoyos.
El capitalino en concreto perdió la jornada en momentos puntuales con los bogeys al 4, al 6, al 15 y al 16. Además, su escaso tino en estas últimas horas con el putter le impidió sacar la cabeza en una ronda en la que bajó hasta el T30, seis puestos por encima del barcelonés Eduardo de la Riva (73 golpes, -1), único nacional en huir del positivo el domingo. Y eso que empezó con dos bogeys al 3 y al 4. Sin embargo, los tres birdies del 9, el 10 y el 12 –su bandera fetiche en estos tres últimos días- le valió para quedarse en un negativo del que le privó el nuevo bogey en el 18.
Aun así el catalán consiguió alcanzar el negativo, eso sí a diez golpes del italiano Renato Paratore (70 golpes, -11), que se ha graduado en Malmö después de aguantar como todo un veterano las embestidas de los ingleses Matt Fitzpatrick (68 golpes, -10) y Chris Wood (72 golpes, -10) para alzarse con su primer torneo como profesional en el European Tour con solo 20 años.
El jugador romano, que rondó las primeras posiciones de la tabla en todo momento del campeonato, dio el zarpazo definitivo con cuatro birdies y un solo bogey que le han permitido irse a casa con el trofeo. Nacho Elvira (74 golpes, +3) se ha marchado del país escandinavo sin tener la oportunidad de entregar una cartulina por debajo del par.
Pingback: Elvira, Pigem, Anglés, Cañizares, Oriol y Fernández, con un deseo: levantar el trofeo en el Nordea sueco OpenGolf.es