La bola tenía que ir por ahí… y por ahí que fue. El australiano Matt Jones lo tenía muy claro desde el principio nada más acercarse al green en el par 3 del 14. Y es que pese a la distancia que le separaba de bandera, unos 17 metros, el deportista de Sídney sabía a ciencia cierta por dónde tenía que tirar el putt para que comenzara a salvar desniveles hasta llegar al centro del agujero.
Sin lugar a dudas fue el Golpe del Día de la primera jornada del FedEx St. Jude Classic, un purazo que le espoleó en el final de su ronda hasta tal punto de acabar consiguiendo otros dos birdies más en sus cuatro banderas restantes para meterse de lleno en el Top 5 del evento con cinco bajo par, a solo un impacto de los líderes.