Son muchos los focos que a estas horas están puestos sobre la figura del jugador estadounidense. Y no es para menos. Al igual que ocurriera el pasado año, Tiger participará en el Hero World Challenge tras un largo calvario del que parece haberse recuperado. Ahora bien, esperemos que los resultados sean otros, pues muchos recordarán el antepenúltimo lugar que ocupó entre los 18 jugadores que se dieron cita en New Providence. El californiano fue el que más birdies convirtió, sí, pero también el que más erró en los greenes, lo que le dejó catorce impactos por detrás del ganador Hideki Matsuyama.
Los 4,38 puntos de la clasificación mundial conseguidos esa semana le valieron por aquel entonces para ascender al puesto número 650, una subida de varios centenares de posiciones que podría quedarse en nada en comparación con lo que el 14 veces ganador de Major podría conseguir en solo unos días. Y es que gracias a una información elaborada por el experto en ranking mundial y twittero Nosferatu, hemos podido saber que solo con participar las cuatro rondas sin retirarse Tiger subiría alrededor de 250 plazas.
Unos números que se acrecentan en función de si Big Cat se va acercando a los puestos de privilegio. De hecho, si finaliza en la décima posición en solitario subiría 530 puestos para situarse alrededor del 700 del mundo, mientras que si acaba segundo en solitario estaríamos hablando de un avance de 950 plazas, metiéndose cerca de los 250 mejores del mundo.
¿Y si se le ocurre llevar a cabo la proeza y ganar? Pues entonces apaga y vámonos. Tiger subiría aproximadamente unos 1070 puestos para colarse entre los 135 mejores del mundo. Una proyección interesante, ¿verdad? Aunque no vendamos la piel del oso antes de cazarlo y disfrutemos, de momento, con su vuelta a la competición.