Escocia tendrá una ley que impedirá a Trump beneficiarse de las desgravaciones por Turnberry

La normativa, que hasta la fecha permitía a las empresas dejar de abonar al fisco en el caso de que declarasen pérdidas, incluirá a partir de 2019 el matiz de que el conjunto de las propiedades de la misma no podrá tener un valor mayor de un millón y medio de libras

El presidente de los Estados Unidos, de nuevo en el punto de mira de un gobierno europeo. Foto: @FT

Qué diferencia cuando no se tiene ni voz ni voto en un sitio y, además, se siente indefensión al protestar. Y es que el máximo dirigente de los Estados Unidos ha visto cómo en el mismo mes le han pagado con la misma cara de la moneda que utilizó hace solo unas fechas para pagar menos impuestos por sus propiedades de Golf en los Estados Unidos. Donald Trump perfiló por aquel entonces una ley para poderse desgravar las pérdidas ocasionadas en sus campos, pero no ha podido hacer lo mismo en el Trump Turnberry situado en Escocia.

Aquí, más bien -aunque en los últimos tiempos también ha sido así- le ocurrirá todo lo contrario, y su joya de la corona europea verá incrementados los impuestos después de que el parlamento del país británico haya sacado adelante una norma que entrará en vigor en 2019 y que posibilitará que el excéntrico gobernante no pueda beneficiarse de las ayudas relativas a proteger a los negocios que cuenten con pérdidas anuales.

Según apunta Newsweek, el legislativo escocés ha alterado la redacción del articulado para que solo las propiedades valoradas en menos de un millón y medio de libras puedan acogerse a estos beneficios fiscales, lo que choca frontalmente con la tasación de una de las instalaciones con más renombre de las islas británicas. De este modo Trump, que este 2017 sí que ha podido “mantener a flote” Turnberry después de dejar de ingresar al fisco la suma de 113 mil libras, ha sido apartado ipso facto de esta generosa desgravación fiscal.

La medida ha obtenido el consenso de numerosos partidos políticos y muchos se felicitan por lo que consideran gran cambio. En esta línea apunta Patrick Harvie, miembro del Partido Verde, que señala directamente a Trump como gran perjudicado por la ley: “Ya es suficientemente malo que tenga una presencia comercial en Escocia. Es irritante saber que el erario público le estaba ayudando”, sentenció. Ahora habrá que esperar a las noticias desde el otro lado del charco para ver cómo se lo ha tomado el presidente.