Que el golf es duro ya lo sabemos, lo hemos visto en infinidad de ocasiones siendo el green uno de los escenarios habituales del que no se libra nadie, ni siquiera el número dos del mundo Jon Rahm. El jugador español tuvo un fatal arranque en la llamada jornada del movimiento en el WGC-México ya que en el hoyo uno necesitó de 4 putts, 3 de ellos desde un metro al no coger la línea en ningún momento motivo por el que anotó un duro doblebogey.
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— PGA TOUR (@PGATOUR) 3 de marzo de 2018