Atendiendo a las dos primeras rondas sobre la hierba del Travis Pointe de Michigan pocas personas se atrevían a vaticinar que la semana en la LPGA podía finalizar con un resultado tan satisfactorio para una de nuestras compatriotas. Pero así ha sido. Carlota Ciganda (67 golpes, -10) ha cuajado una de las mejores rondas del domingo para poner el broche de oro al LPGA Volvik con un Top 10 que sabe a gloria después de los sinsabores que nos dejaron los primeros 36 hoyos.
En estos la pamplonica acumuló solo un dos bajo par que la tenían en tierra de nadie, a la misma distancia de dar un empujón definitivo hacia arriba que se hundirse en el fondo de la tabla. Pero la navarra optó por lo primero, por no perderle la cara en ningún momento al campeonato y aprovechar sus oportunidades. Solo hay que darse una vuelta para esta última ronda para hacerse una idea de qué manera ha resuelto sus compromisos alrededor de bandera.
Hasta seis birdies acumuló la golfista española en los 18 hoyos finales, lo que unido al atasco en la zona alta de la tabla, ha provocado que un diez bajo par haya sido suficiente para formar parte de la zona noble. Porque a la clarividencia en relación a los birdies se le ha unido que Carlota tan solo cometió un fallo, quedándose finalmente a seis impactos de la australiana Minjee Lee (68 golpes, -16), quien ha vencido después de aguantar estoicamente las acometidas de la surcoreana In-Kyung Kim (67 golpes, -15) y de la tailandesa Moriya Jutanugarn (65 golpes, -14).
Luna Sobrón (75 golpes, +3), segunda y última española durante el fin de semana, cuajó la peor vuelta de la semana por culpa de dos bogeys y de un doblebogey en los cuatro últimos hoyos y se fue hasta el septuagésimo puesto, muy lejos de toda opción de pelear por algo grande.