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El vizcaíno sigue peleando y ya ha alcanzado al vagón de cabeza. Foto: @EuropeanTour
Hacer pocas y esperar el fallo de un inspiradísimo Erik Van Rooyen (66 golpes, -14). Así es como se presenta la pelea por el título tanto para Jon Rahm (67 golpes, -6) como para Jorge Campillo (69 golpes, -6) en este Irish Open que en solo unas horas llega a su parte final. Una fórmula difícil a tenor de cómo ha jugado el sudafricano los 54 primeros hoyos, pero a la que se agarran los nuestros desde un Top 10 al que han accedido en esta jornada del movimiento después de dos grandes vueltas por debajo de los 70 impactos.
Especialmente meritoria ha sido la del vizcaíno, que continua su ascenso imparable tanto en ritmo competitivo como a nivel clasificatorio -sobra recordar que tras la ronda del jueves marchaba más allá del puesto 90– y ha vuelto a mejorar sus registros con unas primeras nueve banderas de infarto. En éstas el León de Barrika ha conseguido seis birdies y un bogey que hacían presagiar un día muy productivo para el español.
Y, de hecho, así fue. Aunque se quedó en el cinco bajo par en la jornada. Los putts no quisieron entrar una vez que realizó el cruce -sirva como ejemplo la perfecta corbata en el 18– y, pese a su esfuerzo, le dejó la oportunidad a los líderes de que se escaparan -una ocasión que solo aprovechó Van Rooyen-. En la misma tesitura se encuentra Jorge Campillo, que llegó a figurar en el Top 5 durante muchos minutos del sábado. Sin embargo, un doblebogey en el 18 -el mismo hoyo que el viernes le costó el único fallo del día- le echó un poco por tierra el fantástico esfuerzo en las 17 banderas anteriores con seis birdies y un solitario bogey.
Tras ellos, Gonzalo Fernández-Castaño (72 golpes, -2) aparece en el Top 25 después de salvar por tercer día consecutivo los números positivos, mientras que Adrián Otaegui (74 golpes, +1), Pablo Larrazábal (73 golpes, +2) y Nacho Elvira (76 golpes, +3) completaron la actuación de los nuestros en el primer día con climatología made in Ireland a base de lluvia y viento.
En el Prague Golf del Challenge Tour Adrià Arnaus volvió a sellar el par en su cartulina y se aleja a cinco golpes del líder, el alemán Marcel Schneider. Además, su tropezón ha sido aprovechado por Alfredo García-Heredia, que ya cuenta con dobles dígitos y se sitúa a cuatro del teutón.
