No cabe duda de que Tiger Woods es la estrella en París, solo hay que ver el público que arrastra en los entrenamientos -el llamado efecto Tiger- para darse cuenta de la importancia de este jugador en la Ryder Cup, algo que se ha podido volver a comprobar en la tarde de este jueves durante la ceremonia de inauguración.
Dos fueron las veces que Jim Furyk nombró a «Big Cat» -no contamos las veces que apareció en las pantallas gigantes de televisión y la reacción del público- y en las dos ocasiones ese mismo público le dedicó una atronadora ovación, en especial la segunda vez cuando su capitán lo citó como último jugador del turno de mañana formando pareja con Patrick Reed.
En ese momento, el californiano tuvo que mantener el saludo que le llegaba de todo el público asistente, no importaba si era americano o europeo, todo el auditorio se levantó para ovacionar, incluido los presentes en el escenario, al campeón el pasado domingo en el Tour Championship.
Welcome to France, @TigerWoods. ??#RyderCup pic.twitter.com/DlAKa14H6u
— PGA of America (@PGA) 27 de septiembre de 2018