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La candidatura transalpina se mantendrá a pesar de los continuos rumores. Foto: @CorriereWebRoma
Cada vez que Keith Pelley sale a la palestra no deja indiferente a nadie. El CEO del European Tour acostumbra a dejar titulares allá por donde va y este pasado fin de semana, en mitad de la disputa del Turkish Airlines Open, no decepcionó en un encuentro casi fortuito con periodistas. “Estoy dispuesto a contestar todo aquello sobre lo que me preguntéis”, dijo el norteamericano. Y los reporteros no dejaron pasar la ocasión para acribillarle a preguntas, donde la Ryder Cup tuvo gran parte de protagonismo.
“La pasada edición de París fue un auténtico éxito en todos los aspectos”, comenzó diciendo el hombre fuerte del circuito del viejo continente antes de quitarle hierro a los rumores que apuntan a la caída del evento que tendría que acoger Roma en 2022. “No son más que eso, rumores. Es cierto que el nuevo campo que se está construyendo en el Marco Simone Country Club lleva algo de retraso, pero nada ha cambiado. Lo dije y me reafirmo en que Roma acogerá la Ryder en 2022”, aseguró.
“Nuestro equipo de diseñadores está allí semanalmente. La construcción está en marcha. La gente habla de que hay problemas, pero no son más que especulaciones. De hecho, ya hemos tenido las primeras conversaciones para intentar que la ceremonia de inauguración se celebre en el Coliseo. Conversaciones serias con funcionarios italianos, personas que realmente tienen poder de decisión en todo esto”, sentenció Pelley. ¿Se imaginan lo que sería poder vibrar con la presentación del torneo en un lugar tan icónico como la arena romana?
Pues lo cierto es que este sueño podría estar al alcance de la mano de aquí a solo cuatro años. La cuenta atrás ya ha comenzado y una cosa es segura a tenor de las palabras del CEO del circuito del viejo continente: Italia será la tercera sede fuera de las islas británicas tras Cádiz y París que acoja este competición.
