El golfista norteamericano fue por aquel entonces el más joven en lograrlo después de una ronda tremenda en la que hizo gala de su enorme repertorio de golpes para alegría del público congregado en Hawái
El tiempo pasa a una velocidad increíble. Fíjense si no que ya hace dos años desde que Justin Thomas saltara a las portadas de todos los medios deportivos del mundo por conseguir una hazaña única: convertirse en el jugador más joven en firmar un 59 en una ronda oficial. Ocurrió en la primera jornada del Sony Open, un torneo de grandes recuerdos para el joven estadounidense que lo situaba en el mismo grupo que Al Geiberger (1977), Chip Beck (1991), David Duval (1999), Paul Goydos (2010), Stuart Appleby (2010) y Jim Furyk (2013). Hoy, 24 meses después de la proeza, todavía nos acordamos de ella como si hubiese tenido lugar ayer mismo.
