Si hace unas horas nos congratulábamos de que esta edición del PGA Championship sería la primera en la que contaríamos con la presencia al completo del Top 100 mundial, tenemos una lamentable noticia para el espectáculo: esto finalmente no será posible. Y lo cierto es que el que finalmente se ha caído del segundo Major de la temporada es una ausencia importante entre todos los que forman parte del field. Se trata de Justin Thomas, que este mismo lunes por la tarde dio a conocer la decisión al público después de no sentirse cómodo tras la primera jornada de prácticas.
“Desafortunadamente, no voy a poder estar presente en la 101ª edición del PGA Championship en Bethpage Black esta semana porque mi muñeca todavía no está lo suficientemente curada”, afirmó el estadounidense a través de un comunicado. “Obviamente, como antiguo campeón, este torneo es muy importante para mí. Tiene el campo más fuerte de la historia y estoy decepcionado por no estar entre los participantes. No obstante, soy optimista sobre una vuelta en un futuro cercano”, sentenció el deportista de Louisville.
Thomas se retiró hace un par de semanas de la disputa del Wells Fargo para llegar en buenas condiciones físicas de cara a la segunda gran cita de año. Sin embargo, sus problemas no han remitido y ahora se ve obligado a perderse una cita marcada en rojo en el calendario. Un contratiempo con el que llueve sobre mojado, pues ya le dio algún que otro quebradero de cabeza durante la parte final del pasado curso.
Así pues el jugador de 26 años, que en principio estaba encuadrado para participar en uno de los grandes encuentros de las dos primeras jornadas junto a Adam Scott y Sergio García, cede su sitio a su compatriota Kelly Kraft y manda un serio mensaje de advertencia sobre si llegará o no a tiempo para el US Open.