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La inglesa posó feliz con sus recuperados palos sobre la hierba de Gleneagles. Foto: @Jodi_Ewart
No es la primera vez que somos testigos de una situación así -y lo más seguro es que tampoco será la última-, pero todavía se nos hace muy sorprendente que a estas alturas de la película le sigan ocurriendo estas cosas a deportistas profesionales. Nos estamos refiriendo, como habrán podido observar en el titular, a la pérdida de palos por parte de las compañías aéreas. Aunque esta vez hay un agravante en todo esto: que el torneo que se disputará esta semana es la Solheim Cup, la cita bianual por países más esperada en el Golf femenino.
Las protagonistas de esta rocambolesca historia, para que no se enfade nadie, son Angel Yin, por parte del equipo americano; y Jodi Ewart Shadoff, por el bando europeo. De hecho, la norteamericana perdió al menos dos maletas en el vuelo que le debía transportar esta semana a Escocia, donde a partir del viernes tendrá lugar la prueba sobre la hierba de Gleneagles -y, según fuentes consultadas, a estas horas solo ha podido recuperar la ropa-. Pero la historia con más miga es la protagonizada por la inglesa.
Jodi Ewart se percató desde un primer momento que el personal encargado de depositar el equipaje no estaba subiendo al avión los palos en el trayecto que le debía conducir de Orlando a Edimburgo, pasando por Dublín. “Lo estaba viendo desde la ventanilla del avión y se lo comentó a una azafata, pero le aseguraron que sus palos terminarían cargándolos”, reconoció su marido en Instagram. Pese a ello, la jugadora llegó y lo más que se encontró a su recibimiento fue una bolsa del Team Europe vacía con su nombre serigrafiado.
“Estoy esperando llenar esta increíble bolsa vacía con palos”, señaló la jugadora, aprovechando para citar a la compañía. Una historia que tuvo final feliz este mismo martes por la mañana, con la golfista posteando una foto abrazada a sus palos.
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