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El canario se ha situado en el T9 en el comienzo de la CJ Cup. Foto: OpenGolf.es
Comienzo agridulce de la Armada española en la CJ Cup que ha arrancado este jueves sobre la hierba del Nine Bridges surcoreano. Y es que si bien es cierto que Rafa Cabrera Bello (68 golpes, -4) ha podido jugar bajo el par del campo para posicionarse en estos momentos dentro del Top 10, Sergio García (73 golpes, +1) ha tenido que volver a lidiar con un día de juego muy irregular que lo deja con una tarjeta por encima del par del campo y con un resultado al que tendrá que poner remedio desde este mismo viernes si no quiere pasar sin pena ni gloria por el torneo.
Dicen que lo que mal empieza, mal acaba. Y el de Borriol dio un clínic de este refrán desde los primeros momentos del campeonato. El español, que acudía al debut del curso en el PGA Tour después del buen sabor de boca que le dejó la jornada de domingo en el Open de España, arrancó su participación con un bogey en el hoyo 10 que no encontró atisbo de solución en la primera parte del recorrido. Es más, un nuevo error en el 17 lo colocaba ya desde el principio en la parte baja y solo un birdie en el 18 le privó de pasar el mal trago de verse en una de las últimas plazas.
Pero poco duró la alegría, pues un nuevo bogey en el 1 volvió a colocarlo con la obligación de reaccionar para no perder el vagón de los mejores. Y, aunque la reacción llegó con dos aciertos en el 3 y el 5 que devolvieron las aguas a su cauce con el Par total, dos errores y un nuevo birdie hasta el final de la ronda le obligaron a entregar el +1 que campea en estos momentos en su casillero y a instalarse por debajo del Top 50 del evento. Todo lo contrario que el grancanario, que ha sabido continuar la inercia del subcampeonato en el Club de Campo Villa de Madrid para no perder de vista una parte alta que integran el surcoreano Byeong Hun An (64, -8) y Joaquín Niemann (65, -7).
El español dio durante el día pasos cortos, pero seguros. Esto le facilitó la tarea de mirar siempre los primeros puestos de la tabla con un juego efectivo y rozando un muchas ocasiones la oportunidad de restarle golpes al campo. Así, llegaron pronto los birdies del 11 y el 12 que, aunque se encontraron con el inesperado fallo del 15, supo poner remedio pronto con el acierto del 17. Una dinámica que se respiró en la segunda parte del recorrido para ganarle de nuevo la partida al complejo para situar su nombre como uno de los que hay que tener en cuenta hasta el domingo.
