Lo intentó hasta última hora, pero Azahara Muñoz (73 golpes, -5) fue a escoger el peor día para entregar la vuelta más floja de la semana. La andaluza, que arrancó en el liderato en solitario del Ladies Scottish Open con la intención de lograr su segunda victoria en la gira más prestigiosa del mundo tras más de ocho años de sequía, se dio de bruces con un The Renaissance Club que este domingo le sacó de quicio a más de una jugadora. Y la de San Pedro de Alcántara no fue una excepción.
“Aza” completó una primera parte del recorrido con dos bogeys y un doblebogey sin aciertos que la hicieron retroceder hasta el -3 total y, en consecuencia, deslizarse en la tabla por debajo de las cinco primeras plazas. No obstante, fue hacer el cruce y la malagueña demostró por qué ha sido uno de los grandes nombres de la semana en las islas británicas. Dos birdies como dos soles en el 13 y el 16 le dejaba el camino libre para hacer de las dos últimas banderas un auténtico duelo Match Play contra la norteamericana Stacy Lewis (72 golpes, -5), con quien se encontraba empatada en lo más alto.
Par de las dos en el 17 y el 18 se presentó como una oportunidad a cara o cruz para salir victoriosas. El par les aseguraba la muerte súbita junto a Emily Kristine Pedersen (68 golpes, -5) y Cheyenne Knight (70 golpes, -5), que unos minutos antes habían puesto en Casa Club el -5 que campeaba en sus cartulinas, y el birdie las elevaba a la categoría de campeonas. Sin embargo, ambas sellaron el 4 -la española con un espectacular purito- y salieron a un multitudinario desempate con todo por decidir.
Y aquí la que más tino tuvo fue Lewis, que fue la única en conseguir salir con birdie tras un espectacular segundo disparo. Así pues, la golfista de la Armada se alza con un brillante subcampeonato en una semana en la que volvió a demostrar al mundo que puede pelear codo con codo junto a las mejores del planeta.
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