En un recorrido como el Silverado Resort de Napa el no conseguir birdies en una jornada es casi condenarse a vivir el resto de torneo a remolque, con la espada de Damocles sobre la cabeza y la sensación de estar dejando pasar el tren cuando los hoyos se consumen y no se consigue vencer al campo. Una experiencia de la que pueden dar buena cuenta esta semana tanto Sergio García (69 golpes, -3) como Rafa Cabrera Bello (70 golpes, Par), quienes no han podido hacer borrón y cuenta nueva de todo lo ocurrido el pasado curso y se han despedido del Safeway Open nada más comenzar.
Ambos lo intentaron -un hecho más que evidente al comprobar como tanto el castellonense como el grancanario consiguieron presentar vueltas por debajo del par del campo-, pero las pobres rondas firmadas el jueves han posibilitado que los dos golfistas vuelvan a la casilla de salida con cero puntos en la FedEx y con malas sensaciones para encarar la próxima semana la visita a Winged Foot para disputar el US Open, segundo de los tres Major que se jugarán en este atípico 2020.
Sergio se situó al finalizar los primeros 36 hoyos con tres golpes por debajo del par, a dos impactos de haber podido acceder al fin de semana junto a los mejores, después de haber vivido otro mal día en los greenes. El que fuera Maestro en Augusta en el año 2017 siguió la estela del primer día, dándose oportunidades con los hierros de ganarle golpes al campo. Sin embargo, la gran mayoría de sus intentos cayeron en saco roto y sólo un solitario eagle fue su contribución ofensiva durante la primera parte de su recorrido.
Una guerra en la que no pudo imponerse en ninguna refriega al añadir en su cartulina un error en el 13 tras marrar un putt de apenas dos metros. De este modo, los birdies en el 16 y el 18 tuvieron poca importancia y no hicieron más que permitirle maquillar los números. Una situación muy parecida a la vivida por el isleño quien, a pesar de arrancar muy fuerte el viernes con cuatro birdies sin errores en las nueve primeras banderas, se fue desinflando poco a poco hasta el punto de acabar cometiendo bogeys en el 12, el 14 y el 15 para, con un birdie final en el 18, colocar su cartulina al Par.
Guarismos muy alejados de los presentados por la parte alta de la tabla, pues el líder Sam Burns (65 golpes, -15) ha vuelto a demostrar que el campo está para hacerle pocas y cuajó una gran vuelta con nueve birdies y un doblebogey para liderar con dos impactos de ventaja.