Puede que William McGirt no haya conseguido pasar el corte del Sony Open, pero al menos el estadounidense puede presumir de haber conseguido el mejor disparo de la segunda jornada del torneo. Y además en una de las banderas más complicadas, la del par 3 del 17. No lo tenía nada fácil el americano, pues su impacto desde el tee se había quedado corto, a poco más de un metro de alcanzar el green. Así pues, con la bandera larga, McGirt tenía el hoyo a unos 28 metros, con el agravante de recibirle cuesta abajo en un momento del trayecto. Pero lo consiguió. Un chip medido y con la caída justa le sirvió para anotarse el birdie y colocar momentáneamente el -3 en su casillero.