No necesitaba este Ocean Course mucha ayuda para que sus condiciones resultaran la mar de frustrantes para la gran mayoría de jugadores, pero el viento hizo acto de aparición este viernes y con él los resultados fueron al alza. De los 156 golfistas que iniciaron su participación en esta segunda jornada del campeonato, sólo 21 le pudieron ganar la partida al complejo de Carolina del Sur -lo que habla a las mil maravillas de la dura prueba a la que tuvieron que hacer frente hace sólo unas horas-. Y, nuevamente, entre ellos no hubo ningún español.
Tanto Jon Rahm (75 golpes, +3) como Sergio García (73 golpes, +6) volvieron a entregar sendas cartulinas con guarismos en positivo e incluso el vizcaíno tuvo serios problemas para afianzar su posición dentro del fin de semana. Y eso que el día había empezado a las mil maravillas para el número 3 mundial, quien se había anotado dos birdies en sus dos primeras banderas -inició su participación por el 10– para acercarse muy mucho a la zona noble del campeonato. Pero hasta aquí llegaron las noticias positivas y, pese a que los errores se hicieron esperar, cuando llegaron sumieron al español en una crisis de juego que no le permitieron levantar cabeza.
Y gran parte de culpa la tuvo el par 3 del hoyo 17, donde el viento le jugó una mala pasada y no permitió que su bola acabara cogiendo green, alojándose en el obstáculo de agua. Un auténtico mazazo que provocó que, ya en su tercer golpe, disparara a green sin pensar en dejarla cerca de bandera. Lo arregló con dos putts que sellaron el doblebogey y con él el reinicio de su ronda, que volvía a encontrarse al Par. Pero el golpe anímico se hizo notar unos minutos después con un nuevo bogey en el 18. Y tras este vinieron dos más en el 4 y el 7 que situaron su nombre en el Top 37, a cinco impactos del Top 10.
Una zona noble que, dicho sea de paso, nos dejó una gran historia en su parte alta. Y es que el partido del día de esta jornada del movimiento estará protagonizado por dos históricos como Louis Oosthuizen (68 golpes, -5) y Phil Mickelson (69 golpes, -5) que, como si de Regreso al futuro se tratara, pidieron prestado el Delorean para mostrar un juego que hacía mucho tiempo que no les veíamos realizar. Ambos situaron en lo más alto de la tabla, aventajando en un impacto a un golfista de la talla de Brooks Koepka (71 golpes, -4), que cierra el podio y llega con la firme intención de sumar su tercer US PGA en los cuatro últimos años.
La parte más dura del viernes la escenificó Sergio García, que por sexta temporada consecutiva perdió el corte en este Major. El castellonense, a pesar de una vuelta dentro de los estándares normales con cuatro bogeys y tres birdies, pagó el peaje de su fatídico final del jueves y se despide a las primeras de cambio de la segunda gran cita de la temporada.