Dos protusiones en los discos de la zona lumbar traen de cabeza a José Manuel Lara. El valenciano, que prepara el tramo final y decisivo para él del European Tour (debe conservar la tarjeta), ha tomado cartas en el asunto de sus dolores de espalda. Éstos son a veces tan agudos que, los domingos después de tres rondas de golf de competición, apenas puede agacharse a recoger la bola del hoyo.
«Me estoy preparando fuerte para conservar a partir de septiembre la tarjeta, pero con mucha atención sobre el problema de la espalda», comentó Lara a Opengolf en el campo castellonense de Panorámica, en donde pasó algunas jornadas de entrenamiento.
Una de las incorporaciones a su bolsa han sido dos ‘putts’ largos. Uno es un ‘belly-putter’ y el segundo uno convencional pero al que ha añadido unas cuantas pulgadas más con el fin de evitar que la postura en el momento de golpear en el ‘green’ se resienta aún más la espalda.
«Estoy tratándome con sesiones de fisio y con natación. Estoy fortaleciendo la zona. Tengo que intentar conservar la tarjeta pero tengo que apretar el acelerador», añadió Lara, de 35 años y el nº 88 en la ‘Race to Dubai’.