A buen seguro que hubiésemos deseado otro final para el duelo que vivimos en octavos de final del WGC-Match Play entre Jon Rahm y Brooks Koepka, pero lo que nadie puede dudar es que vivimos un auténtico partidazo sobre la hierba del Austin CC en uno de los grandes duelos del turno de mañana. Un envite que tuvo de todo: golpazos, remontadas y, sobre todo, un final acorde a lo que este duelo merecía. Y es que un grandísimo putt del norteamericano le permitió ganar uno de los últimos billetes hacia los cuartos de final.
Pero más allá del resultado, el encuentro fue un toma y daca constante a lo largo de los diecinueve hoyos que duró la partida. Un encuentro en el que el primero en dar un puñetazo encima de la mesa fue BK, quien incluso amenazó con dinamitarlo después de situarse dos arriba a falta de tres. El ex número 1 del mundo estaba de dulce con los hierros y solo una pequeña falta de tacto en los greenes le privó de desmarcarse de un Jon Rahm que achicaba como podía el agua a base de pundonor, consciente de que tarde o temprano le llegaría su oportunidad.
Esta llegó en la parte final gracias a un birdie en el par 5 del 16 y, sobre todo, a un mal hoyo jugado por Koepka en el 17. De hecho, Rahm tuvo incluso la oportunidad de cerrar el partido en el 18 con un putt de poco más de tres metros, pero su golpe se quedó a unos centímetros de encontrar el fondo del agujero. Y quien perdona lo acaba pagando. Ambos salieron de nuevo por el tee del 10 y en el duelo en el green el norteamericano se llevó el gato al agua.
Un jarro de agua fría en las aspiraciones del español, que deberá ver desde fuera de la barrera unos duelos de cuartos de final con amplia presencia norteamericana.
Punching his ticket in a playoff.@BKoepka buries it to take down No. 1 seed Jon Rahm. pic.twitter.com/lIsG11r8iA
— PGA TOUR (@PGATOUR) March 26, 2022
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