Jon Rahm dejó varias perlas durante su comparecencia a los medios en la previa del US Open. Al igual que Rory McIlroy, el jugador español confesó su amor por el PGA Tour y dejó claro que el no juega por dinero en referencia al LIV Golf. «Sí, lo del dinero es genial, pero cuando empezó todo esto y Kelley y yo empezamos a hablar de ello, nos preguntamos: ¿cambiará en algo nuestro forma de vida si obtengo 400 millones de dólares? No, no cambiará nada».
«A decir verdad, podría retirarme ahora mismo con lo que he hecho y vivir una vida muy feliz y no volver a jugar al golf. Así que en realidad nunca he jugado al golf por razones monetarias. Juego por amor al juego y quiero jugar contra los mejores del mundo. Siempre me ha interesado la historia y el legado, y en este momento el PGA Tour tiene eso», añadía.
«Considero que el PGA Tour ha hecho un trabajo increíble brindándonos la mejor plataforma para que podamos actuar. Veo el atractivo que otras personas ven en el LIV Golf. Veo algunos de los, lo diré con delicadeza, puntos o argumentos que pueden hacer sobre por qué lo prefieren», dijo en referencia a los que tomaron la decisión de marcharse a la liga árabe.
«Cuando ganas el Memorial o el Arnold Palmer en Bay Hill tiene un significado. Hay un significado cuando ganas en Los Ángeles o Torrey Pines en algunos de los campos históricos. Eso me importa mucho. Mi corazón está con el PGA Tour. Esto es todo lo que puedo decir», confesaba.
Al mismo tiempo, Rahm entendía las decisiones de otros jugadores. «No es asunto mío ni es mi carácter juzgar a nadie que piense lo contrario. Para mucha gente, no voy a mentir, estos tres o cuatro próximos años serán básicamente su plan de jubilación. Es una muy buena compensación para retirarse».
Para Jon, una de sus máximas preocupaciones en todo este asunto es que pasará con la Ryder Cup y todos estos jugadores que se marcharon al LIV. «No sé qué va a pasar, espero que la Ryder Cup no sufra. Creo que la Ryder es el mayor atractivo que tiene el golf para atraer gente nueva. Me lo pasé muy bien en el campo y en la previa de París. Espero que no perdamos la esencia y el aspecto que es la Ryder Cup. Para ser honesto, esa es una de mis mayores preocupaciones. Es un evento en el que todos jugamos gratis y es una de nuestras semanas favoritas, ganemos o perdamos».
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