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Filippo Celli es el nuevo Campeón de Europa en El Saler
Filippo Celli es el nuevo emperador de Europa Amateur de golf, título conquistado con todo merecimiento por su excelente desempeño a lo largo de las cuatro intensas jornadas celebradas en el Parador de El Saler.
Deslumbrante en la primera ronda, cuando concentró gran parte de sus aciertos para avasallar a todos sus rivales con 64 golpes (8 bajo par), mucho más sobrio en las dos vueltas intermedias (74 y 73), estratégicamente acertado en 18 hoyos finales donde se sobrepuso con serenidad y destreza a los momentos determinantes, Filippo Celli aventajó en un golpe al danés Rasmus Neergard-Petersen, que le cuestionó la victoria hasta el último momento.
Cinco birdies y dos bogeys compusieron su propuesta final, ofreciendo acierto en los instantes más comprometidos y fallando en aquello puntos y momentos donde sus rivales asimismo desvanecían sus opciones de victoria. Cuatro birdies en la primera vuelta le permitieron respiro y otro más en el 15, reafirmación victoriosa sin posibilidad de cambio inesperado de última hora a pesar de que ese error en el siguiente hoyo provocase dudas generalizadas.
La clasificación, apretadísima al inicio de la última jornada, experimentó curiosamente pocos cambios en su parte más alta por efecto de los lógicos errores del numeroso grupo perseguidor, carente del punch necesario para desbancar al golfista italiano de su trono de emperador.
Entre ese grupo opositor se encontraban, fundamentalmente, dos jugadores españoles, el madrileño Jorge Hao y el navarro Javier Barcos. El primero, un prometedor joven de 16 años con un esplendoroso futuro por delante, se distinguió como uno de los grandes protagonistas de la recta final de competición.
Birdie, birdie, eagle -de una tacada nada más comenzar- y otro birdie en el 5 para afianzar lo realizado hasta ese momento fue la devastadora propuesta de Jorge Hao, una espectacular sucesión de aciertos que le hizo ascender como la espuma en la clasificación provisional.
Su atronador ataque le llevó incluso a compartir el liderato provisional a mitad de jornada antes de que su actuación entrase en una fase más relajada y se quedase sin fuelle para afrontar la cota más alta. Sendos bogeys en el 13 y en el 18 ejercieron de freno definitivo a una actuación en todo caso sensacional premiada con la quinta plaza. “Lástima de las dos jornadas intermedias, cuando hice 75 y 74…”, recordaba Jorge Hao antes de añadir “pero he aprendido muchísimo, que de eso se trata”.
Por su parte, Javier Barcos compartía partido estelar con Filippo Celli en su condición de segundo clasificado provisional. El navarro luchó por ascender al último peldaño de la clasificación, un deseo que pasaba por una necesaria acumulación de birdies que en esta ocasión no se adherían a la tarjeta del golfista navarro.
Su cuarto puesto final colmó en cualquier caso sus aspiraciones. “Estoy contento, la verdad, ha sido una magnífica experiencia, aunque también un poco decepcionado porque me queda que podía haberlo hecho mejor”, decía poco antes de que su compañero de partido Filippo Celli fuese premiado con los laureles que le distinguen como nuevo emperador del golf amateur europeo.
Al margen de la actuación estelar de los citados Javier Barcos y Jorge Hao, mención especial para el rendimiento de Samuel Espinosa, noveno clasificado tras registrar un acumulado por debajo del par, -1 en concreto. La regularidad y la brillantez caracterizaron su actuación, plasmada en buenas tarjetas de 73, 72, 72 y 70.
Además, Ángel Ayora y Luis Masaveu compartieron el puesto 18; Pablo Ereño quedó en el puesto 28; Carlos Abril y José Luis Ballester quedaron empatados en el puesto 39, mientras que Sergio Jiménez y Álvaro Mueller-Baumgart acabaron por su parte en los puestos 63 y 64.
Filippo Celli estaba encantado por el hecho de haberse proclamado campeón de Europa Individual, entre otras cosas porque esta distinción lleva aparejado un premio de enorme valor: participar como invitado, junto a los mejores golfistas profesionales del mundo, en el Open Británico.
Por si fuera poco, en esta ocasión el codiciado premio tiene una bonita conmemoración histórica, por cuanto que el célebre The Open alcanza su edición número 150, un número redondo que ha hecho redoblar los esfuerzos a los organizadores para dotar a la competición de todo tipo de eventos paralelos de enorme valor.
Fuente: RFEG
