En un contexto como el actual con continuos ataques entre una y otra facción, lo cierto es que se hace difícil pasar una semana con tranquilidad. Sobre todo en días como estos, en los que se ha juntado el ascenso al número 1 mundial de Rory McIlroy -ferviente defensor de los circuitos tradicionales- y el acto final de temporada del LIV Golf, donde los premios económicos serán el principal atractivo de un evento que se disputa por equipos en Doral -casa de un Donald Trump que será una de las celebridades que se dejen ver a lo largo de la semana-.
Precisamente han sido unas declaraciones por parte del norirlandés las que han prendido una mecha que a estas horas están dando mucho de qué hablar en Miami. En ellas, el vigente campeón de la CJ Cup habló sobre las sensaciones que le producían ver a antiguos compañeros suyos de la Ryder Cup enrolados en la gira saudí: “Creo que es la primera vez en mi vida que me siento traicionado de una manera tan clara. Es un sentimiento desconocido para mí, porque son personas con las que he construido muchos vínculos”, señaló el deportista de 33 años en una reciente entrevista concedida a The Guardian.
Un guante que ha recogido uno de esos jugadores que ha compartido con él tanto tiempo. Se trata de Ian Poulter, uno de los golfistas que decidió hace unos meses emprender el camino del LIV. “¿Traición? Todos los europeos que estamos aquí todavía tenemos posibilidades de clasificarnos para la Ryder de Roma. Creo que mi compromiso con la Ryder Cup me precede. Eso no puede cuestionarse nunca. Siempre la quise jugar y lo he hecho con tanta pasión como cualquier otro. Para ser honestos, no sé a cuento de qué ha venido ese comentario”, sentenció el golfista inglés.
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— PGA TOUR (@PGATOUR) October 24, 2022