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El vizcaíno tendrá que poner toda la carne en el asador el viernes si quiere formar parte del fin de semana. Foto: @PGATour
No fue ni mucho menos el inicio soñado por Jon Rahm (72 golpes, +1) en estas primeras horas del RBC Heritage. El vizcaíno, después de una semana ajetreada tras los compromisos adquiridos por su triunfo en el Masters de Augusta, llegó a la hierba de Harbour Town cargado de moral y, pese a un comienzo que apuntaba maneras con un gran birdie en el 4, empezó a mostrar síntomas de fatiga desde bien temprano. Sobre todo en la parte final de los nueve primeros hoyos, donde tres bogeys de manera consecutiva le pusieron muy difícil la tarea de haber arrancado un gran resultado de su primer encuentro con la hierba del complejo de Carolina del Sur.
Unos números por encima del par que vinieron acto seguido de una suspensión momentánea de la jornada tras la disputa del hoyo 5 por el riesgo de tormenta que había en la zona. En total, fueron algo más de 75 minutos los que el vigente poseedor de la Chaqueta Verde estuvo fuera del campo. Un tiempo que no le sentó nada bien a tenor de los tres errores consecutivos antes mencionados. Sin embargo, el León de Barrika no se dio por vencido en ningún momento y a base de casta logró devolver a su cartulina el Par.
Lo consiguió con dos aciertos en el 13 y el 14 -este último tras quedarse a poco más de un metro y medio del Hoyo en Uno-. Este resultado lo devolvía a la zona de corte virtual de la prueba, aunque fue algo pasajero. Y es que un nuevo bogey en el 16 -este después de verse obligado a droparse con penalidad tras una salida poco afortunada- lo situó de nuevo con guarismos en positivo para acabar retrasándolo al Top 92. Desde aquí se sitúa a seis golpes de una zona noble del evento en la que manda el noruego Viktor Hovland (64 golpes, -7), quien ha iniciado el torneo muy concentrado con una cartulina en la que no ha conocido el error.
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