El espíritu y la fuerza de Seve Ballesteros, siempre viva en la retina de los aficionados, también acompañará al equipo europeo en la Ryder Cup que comenzará el viernes. José Mari Olazábal, el capitán, ha querido rendir tributo a su amigo y mentor bordando en las bolsas de cada miembro de su equipo la inconfundible silueta que simboliza el triunfo de Ballesteros en el Open Británico de 1984 en St. Andrews.
“Es la primera vez que Seve no estará entre nosotros físicamente, aunque sí en espíritu, y he creído que esta es la mejor manera de honrar a un gran campeón pero, sobre todo, a un gran amigo, que estará junto a nosotros en cada paso que demos», dijo Olazábal en declaraciones que difunde el Tour europeo.
«Seve desempeñó un papel decisivo en la Ryder Cup desde que entró a formar parte del equipo en 1979. Siempre estuvo presente incluso en la pasada edición en 2010, cuando habló por teléfono con los jugadores», añadió.
«Seve siempre decía que esa imagen con su puño en alto gritando ‘la metí, la metí’, cuando ganó en la cuna del golf, en St. Andrews, fue el momento más feliz de su vida”, apostilló el capitán.