Después de un turno de mañana en el que muchos jugadores continuaron por la senda de los números en negativo, el turno de tarde sobre la hierba de Los Angeles Country Club rompió los esquemas de más de uno. Los greenes, cada vez más secos y más rápidos, no perdonaban una y los españoles que formaron parte del campo durante la jornada vespertina se las vieron y se las desearon para poder asegurarse una plaza en el fin de semana.
Es el caso de Jon Rahm (73 golpes, +2) que, pese a comenzar el día con guarismos en negativo y con un grandísimo eagle en su primera bandera del viernes que lo situó muy cerca de los diez primeros jugadores de la tabla, sufrió de lo lindo para conseguir llegar a los dos últimos días del US Open. Y la razón fue unos segundos nueve hoyos que tiraron abajo todo el trabajo previo en el que se había anotado, además del mencionado eagle, dos bogeys y un birdie más.
En los nueve hoyos finales los aciertos dejaron paso a los fallos y cuatro bogeys pusieron el punto final a una actuación que lo conduce en estos momentos al Top 49, lejos de una zona alta en la que los números bajos continúan siendo la tónica dominante. Y es que Rickie Fowler (68 golpes, -10) es líder en solitario de la prueba gracias a una cartulina con ocho birdies y seis bogeys, seguido de cerca por Wyndham Clark (67 golpes, -9) y por la dupla compuesta por Rory McIlroy (67 golpes, -8) y Xander Schauffele (70 golpes, -8), que cierra el podio.
Por fortuna, otros dos españoles consiguieron acceder a los dos últimos días de evento. Se trata de Sergio García (71 golpes, +1) y de David Puig (73 golpes, +2), quienes tuvieron que hacer un ejercicio de supervivencia para agarrarse a California y continuar siendo parte del evento los 36 hoyos finales. Alejandro del Rey (79 golpes, +7) y Pablo Larrazábal (77 golpes, +8) no contaron con tanta fortuna y se despiden del US Open.
Cementing his name in @USOpenGolf history.@RickieFowler is on a tear at LACC. pic.twitter.com/qLmfisUIiV
— PGA TOUR (@PGATOUR) June 17, 2023