La primera jornada del XXXV Campeonato PGA de España by Córdoba al final pudo completarse después de dos días de lluvia, tormentas, viento y niebla que envolvieron al Real Club de Campo de Córdoba, complejo situado en un enclave privilegiado de Sierra Morena, pero también dentro de un complejo ecosistema.
Gracias al esfuerzo de todos los trabajadores y operarios del Real Club de Campo de Córdoba, achicando agua de los greenes sobre todo, y de Elena Vera Arroyo y su equipo de greenkeepers, así como todo el equipo humano del club se pudo finalizar la primera ronda del torneo tras dos intensos días de lluvia y niebla que dificultaron el juego.
Sin duda también, la labor de los voluntarios repartidos por todo el campo y a los árbitros de la Real Federación Española de Golf, pendientes del tiempo y del estado del campo consultando toda la información meteorológica. Y por supuesto, agradecer el compromiso y la voluntad de los profesionales de la PGA de España que estuvieron al pie del cañón encada momento, pese a suspensiones y retrasos continuos para sacar el torneo adelante, en las más duras condiciones, con el objetivo de evitar la cancelación definitiva del torneo.
En lo deportivo, Álvaro Hernández Cabezuela firmó una tarjeta de 65 golpes (-7) que vale su peso en oro y que le mantiene como líder absoluto del torneo con tres golpes de ventaja sobre los segundos clasificados, la madrileña María Herráez y el héroe local Marcos Pastor. Casi al final del día, Asier Aguirre tiró de garra y acierto para firma una ronda de 68 golpes (-3) y meterse en la pelea por el título
El corte se realizó al termino de los primeros 18 hoyos, los únicos jugados, en el que pasaron los cuarenta primeros más empatados con la esperanza de que el tiempo de un respiro y se pueda terminar el torneo.
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