Quedarse a las puertas de conseguir la membresía del PGA Tour el pasado curso fue una de las cosas más dolorosas que le han sucedido en su corta pero intensa carrera. Sobre todo cuando ve a su hermano Nicolai cruzar el charco con asiduidad. Fue por esto que Rasmus se lo tomó en serio desde los primeros instantes de este 2024 y a día de hoy es un hecho que conseguirá una de las diez tarjetas que el DP World Tour pondrá en juego para formar parte de la gira americana la próxima temporada.
Un curso en el que ha acumulado siete Top 10 entre los que destacan el subcampeonato en el Ras Al Khaimah y, sobre todo, el triunfo en el pasado Irish Open. Una victoria que lo catapultó en la orden del mérito y que ha posibilitado que a día de hoy se encuentre ocupando la tercera plaza de la Race to Dubai. Un hito que le hace entrar en los PlayOff con posibilidades de arrebatarle a Rory McIlroy el trofeo Harry Vardon que se le concede al golfista más destacado del año.
El noruego es uno de los jugadores que luchará por triunfar en la Race to Dubai 2024
“Lo que me sucedió el año pasado, quedándome a un solo lugar de poder jugar el PGA Tour, fue bastante duro”, confesó el deportista nórdico en una entrevista concedida hace unas horas al circuito europeo. “Obviamente, estaba muy feliz por ver a mi hermano triunfar, pero fue un palo haberlo tenido tan cerca. Eso me motivó este año para salir al campo y jugar un mejor golf. En términos generales, creo que ha sido un gran año”, admitió el joven golfista del viejo continente.
Eso sí, todavía no mira al futuro y tiene la intención de ponerle el broche de oro a la temporada: “Hay tantas cosas que están por decidirse todavía que no me atrevo a pensar en el PGA Tour. Cuando se acabe el curso lo veremos”, sentenció.
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