Un profesional se anotó 7 golpes de penalidad de una tacada por un grosero error con las reglas

El australiano Anthony Quayle levantó hasta en cuatro ocasiones la bola en las calles pensando que se estaba jugando la ronda bajo preferred lies

PGA Tour Australasia, Anthony Quayle,
El deportista oceánico fue uno de los protagonistas involuntarios de la pasada semana en Australia.

Hay días en los que es mejor no levantarse de la cama, sobre todo cuando las condiciones climatológicas no acompañan y te ves obligado a ir a trabajar. Esto mismo fue lo que le sucedió esta pasada semana a Anthony Quayle, uno de los integrantes del Victorian PGA Championship que ha tenido lugar en el PGA Tour Australasia, que se vio obligado a anotarse siete golpes de penalidad de una tacada después de no percatarse hasta casi el final de su ronda de que no podía levantar la bola en la calle.

Quayle, de 30 años, había escuchado campanas, pero no sabía dónde. Conocía que ese día se iba a jugar con preferred lies (se coloca bola), pero lo que no había tenido en cuenta es que la posibilidad de colocarse la bola solo iba a estar permitida en un tramo de la tercera calle. Tierra trágame. Una sensación de abandono recorrió el cuerpo del australiano en el mismo momento en que se dio cuenta. Eso sí, su primera decisión fue avisar a un árbitro para comentarle la jugada.

Hasta los profesionales viven a veces situaciones surrealistas en los torneos

No me sentía cómodo golpeando de nuevo la bola sin comentarle la situación a un oficial de reglas. Sentía que había hecho algo realmente mal y, tan pronto como me di cuenta, sentí un malestar terrible en el estómago”, confesó el propio jugar en unas declaraciones recogidas por los medios nada más finalizar la ronda.

Cuando llegó el árbitro, ambos repasaron las ocasiones en las que el jugador había levantado la bola. Hasta cuatro contó Quayle, que reconoció que en dos ocasiones volvió a colocar el esférico en una posición ligeramente diferente, que en otra lo había situado en el mismo lugar y que en la última no se acordaba.

Vista la situación, el árbitro dictaminó que el golfista debía anotarse dos golpes de penalidad por cada vez que fue levantada la bola y colocada en una situación distinta (regla 9.4) y una penalización de un impacto por cada vez que la hubiese devuelto al lugar correcto.

En resumen: Quayle se anotó siete golpes de una tacada, fomentando que su cartulina final pasara del 66 al 73 que finalmente entregó. Una ronda, sin embargo, que le dio alas para pasar el corte, primero, y lograr un lugar en el podio, posteriormente.

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2 respuestas

  1. Siete golpes de penalización serán 2+2+2+1, o sea que de las cuatro veces tres jugó desde lugar equivocado, y una dijo el jugador que la levantó pero la repuso en el mismo sitio. Aunque todas las veces infringe la regla 9.4 por levantar su bola en juego, la regla por la que se aplica la penalización general (dos golpes) es la 14.7, porque en este caso, aunque hay dos infracciones a las reglas, solo se aplica la penalización más alta.
    No seguí este torneo pero supongo que la situación se detectó en uno de los dos o tres primeros hoyos, y no casi hasta el final de la ronda, como dice el artículo, porque si hubiera sido así, seguro que el jugador hubiera colocado muchas más veces, y además, supongo que sus compañeros de partido le alertarían en cuanto se dieron cuenta.
    Disculpad el matiz. Si fuerais el Marca, no me extrañaría, pero al ser una publicación de golf, que además sigo con mucho agrado, prefiero indicároslo. No os culpo, porque son observaciones comunes, incluso con frecuencia en la tele que seguramente tiene más audiencia e impacto.
    Gracias por vuestro trabajo.
    Saludos.

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