La iniciativa cuenta además con el respaldo de Amgen que donará 3€ por cada espectador que lleve algo verde y 300 por cada birdie o mejor

Rory McIlroy, Shane Lowry y el resto de participantes del Irish Open lucen este fin de semana un pequeño detalle con gran significado; cintas verdes en sus gorras. El gesto responde a una campaña solidaria en favor de Make-A-Wish Ireland, organización benéfica, que cumple los deseos de niños con enfermedades graves.
La iniciativa cuenta además con el respaldo del patrocinador principal, Amgen, que donará 3 euros por cada espectador que lleve algo verde durante la semana, así como 300 euros por cada birdie o mejor resultado conseguido en el campeonato por alguno de los participantes en el evento.
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El ejemplo más conmovedor de esta acción lo protagonizó Daire, un niño de 11 años en remisión tras superar una leucemia aguda, que pudo cumplir su sueño de conocer a Shane Lowry y caminar a su lado por el campo. Un momento emotivo que recordó a todos el verdadero trasfondo de esta cita.
Más allá de la competición, las cintas verdes se han convertido en un símbolo de unión y solidaridad; reforzando el vínculo del Irish Open con la comunidad y mostrando cómo el golf puede ser también una herramienta para transformar vidas.
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