Mirando a corto y medio plazo, el Real Guadalhorce se marca un horizonte ambicioso. «Nos hemos propuesto superarnos y vamos a por todas»

El Andalucía Costa del Sol Open de España 2025 volverá a disputarse del 27 al 30 de noviembre en el Real Guadalhorce Club de Golf (Málaga) tras el éxito rotundo cosechado en 2024. El campeonato reunirá a las 64 mejores de la Orden de Mérito y a 11 invitadas, consolidando a Málaga como escaparate del mejor golf femenino europeo y como destino con retorno deportivo, mediático y económico.

Para Ángel Gancedo Arjona, presidente del Real Guadalhorce, repetir como sede confirma una línea de trabajo sólida. «Volver a ser sede de este gran torneo es un reconocimiento al trabajo bien hecho. En 2024 demostramos que Guadalhorce tiene todo lo necesario para acoger una gran final: un recorrido exigente, unas instalaciones de primer nivel y un equipo humano entregado».

Durante este año, el club ha acometido mejoras en el campo y en las instalaciones, «trabajando codo con codo con los técnicos de la RFEG y del circuito europeo» para ajustar cada detalle de cara a noviembre. «Fue nuestra prueba de fuego, como subir a la división de honor de la organización de torneos; llegamos al sobresaliente y este año vamos a por matrícula de honor».

Para Ángel Gancedo Arjona, presidente del Club, repetir como sede confirma una línea de trabajo sólida

Gancedo sitúa en el factor humano la clave del éxito. «Lo fundamental es el equipo. Presido un club cuya mayor virtud es su personal, siempre entregado. Tampoco debemos olvidar a los voluntarios, que ayudan de manera desinteresada, ni a la generosidad de los socios, que ceden sus instalaciones durante varios días». En lo operativo, el club prioriza «el estado del recorrido, la convivencia del público con la competición y la excelencia en la atención a las jugadoras»; además de la coordinación con árbitros y equipos técnicos. «Vamos a ofrecer la mejor versión de todo el club»; resume.

El balance de 2024 refrenda la dimensión del Open. Según datos del club, el evento registró 10.750 espectadores, 86 medios acreditados, 125 voluntarios y más de 350 empleos vinculados al operativo. En el plano mediático, se produjeron 12 horas de directo con distribución internacional a 87 países, alcanzando una cobertura potencial de 143,9 millones de hogares y una audiencia estimada superior a 240 millones. En lo económico, el Real Guadalhorce cuantificó un impacto directo de 623.700 euros, mientras que el efecto inducido ascendió a 40 millones de euros para Málaga.

La edición deportiva de 2024 dejó, además, un relato potente; Carlota Ciganda conquistó en Guadalhorce su segundo Open de España, igualando en el palmarés histórico a Azahara Muñoz y Anne Van Dam. La afición malagueña llenó el recorrido y celebró el brillo de la cantera; la madrileña Andrea Revuelta, quinta clasificada, recibió el Premio Celia Barquín a la mejor amateur. «La victoria de Ciganda, la mirada de los aficionados, la alegría de nuestro personal, la entrega de los socios… fue un gran Open»; recuerda Gancedo. «Este año nos vamos a superar».

El presidente subraya también el retorno territorial. «La importancia del torneo no solo radica en la competición, sino en su repercusión mediática y económica. Refuerza a Málaga como destino clave del golf femenino, atrae a profesionales y aficionados y posiciona a Andalucía como epicentro del deporte de élite». La respuesta interna, añade; «fue inmejorable» tanto por parte de los empleados, «entregados al 100%»; como de los socios, «conscientes de lo que supone albergar un Open de España en su club».

Mirando a corto y medio plazo, el Real Guadalhorce se marca un horizonte ambicioso. «Nos hemos propuesto superarnos y vamos a por todas. Es una gran oportunidad para el club, para Málaga y para Andalucía»; afirma Gancedo, abriendo la puerta a nuevas cimas organizativas. «Estamos preparados para albergar cualquier evento del calendario a nivel nacional o internacional. El Real Guadalhorce se ha consolidado como uno de los campos de excelencia de la Costa del Sol y seguirá creciendo».

Con bases reforzadas -un club anfitrión que eleva estándares, una afición que responde y un cierre de temporada que garantiza golf de máximo nivel con difusión global y retorno tangible-; Málaga vuelve a abrir sus puertas al mejor golf femenino europeo.

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