Muchos de sus compañeros sabían que Bubba Watson se había comprado una nueva casa en Orlando, en una urbanización privada, y que estaba inmerso en la remodelación de la que sería su nuevo hogar. Pero lo que nadie sabía es que esa casa se trataba de la antigua vivienda de su amigo Tiger Woods.
Esa propiedad, en Islewood, es la misma en la que Tiger y su exesposa, Elin Nordegren, vivían cuando estalló el escándalo de, en aquella época, el número uno del mundo.
“Es cierto que nos mudamos”, declaro Watson a diversos medios estadounidenses. “Cerramos la compra el pasado verano y nos mudaremos en los próximos días, durante el Arnold Palmer Invitational.”
“Es posible que miráramos unas 50 casas antes de ver la de Tiger. La hemos remodelado por completo, creo que solo habremos dejado un cinco por ciento de la antigua y todo ha girado a través de nuestro hijo Caleb. Hay como tres habitaciones de juego”, continuaba el ganador del Masters de Augusta 2012.
Bubba Watson y su esposa Angie están en proceso de adoptar un nuevo niño. Los Watson adoptaron a Caleb con un mes de vida, hace ahora un año, tal y como reflejaba en su momento OpenGolf, Bubba, mucho amor antes del Masters.
El zurdo llevaba tiempo buscando una comunidad cerrada y con una fuerte seguridad. Bubba citó un incidente ocurrido en 2012, donde Bubba y su esposa se vieron envueltos en una persecución de tráfico camino a su casa.
“Nuestro mundo es una locura, y vemos lo que sucede en las noticias. Es bueno tener la mente tranquila cuando sales a dar un paseo o simplemente sales a la calle”, precisa.
Bubba tendrá como vecinos a otros ilustres jugadores de golf del PGA Tour, Graeme McDowell, Ian Poulter, Justin Rose y Charles Howell, entre otros.