Los hijos de Tiger Woods cada vez con más frecuencia acompañan a su padre a los torneos del circuito. Primero se vio al chico, Charlie, seguir los pasos del mejor jugador del mundo y en el lunes del Deutsche Bank, fue su hija Sam la que, incluso, vestía de manera idéntica a como Tiger disputa sus últimas rondas, de rojo y negro. Entrañable estampa.





