Llegados el final del 2014 es hora de hacer balance, en este caso de los mejores golpes en el PGA Tour. El temple de Martin Kaymer volvió a salir a relucir en el hoyo 17 del TPC Sawgrass durante la ronda final de THE PLAYERS cuando no le tembló el pulso en este putt decisivo desde una distancia de casi diez metros.
El alemán lo embocaba recordando a aquel en Medinah con el que el equipo europeo empataba en tierras estadounidenses para traerse la Ryder Cup de nuevo a Europa.





