El diseñador del campo de golf para los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro que se celebrarán en 2016 se ha mostrado “entusiasmado” con la evolución de la construcción del recinto para un deporte que vuelve a ser olímpico ese año.
Hanse ha manifestado que “todavía estamos esperanzados” con el proyecto que ha sufrido unos cuantos contratiempos: desde la aparición de caimanes hasta un litigio legal por la conservación o no de una reserva natural. De hecho, las obras comenzaron con retraso de un año por problemas con la compra al propietario de los terrenos, Pasquale Mauro.
“No nos han pedido ningún cambio, por lo que estamos orgullosos de lo que se está construyendo”, ha reiterado Hanse.